Reclamo al sueño

Por que eres como un amante esquivo, en todo caso no serias ya ni mi amante, pues cual es la razón de esquivarme?

Trato de abrazarlo y me le acerco, a veces timidamente y a veces con furia y artificios.

El me sopla calidamente la frente y cuando ya va a besarme, siempre hay una tocesita sin rostro o el recuerdo de un pendiente que nos distrae de nuestras caricias.

Me niego a que me abandone, respiro con las pausas aprendidas ya no se en donde, cierro suavemente los ojos y trato de nuevo de que se acerque a mi, de que finalmente llegue y me llene.

Pero de nuevo, una corriente de aire frio, un alza en el volumen de lo que acontece lo asusta y se escurre.

Deja ya el miedo y las sutlezas, por favor! Entregate a mi como yo quiero entregarme a ti. No deseo seguir con estos agotadores juegos de escondite.

Dejame disfrutarte y permiteme descansar en tu nada

 

Que vamos a hacer, Lupita?

Que vamos a hacer contigo,  que vamos a hacer conmigo?

Pobre perra, abandonada tantas veces. Que destino, carajo!

Naciste en un basurero, o al menos allí te encontraron. Sola, no estaba tu madre por allí, ningún hermano tampoco. Así que este fue tu primer abandono. Llena de parásitos, empapada, hambrienta y esperanzada. Pequeñita, tan chiquita que cortamos la parte de abajo de varias medias para ponértelas de abrigo. Tan necesitada, pero tan determinada a ganarte el amor, como fuera.

Nunca desee tenerte. Especifique una y mil veces que no quería mas perros en mi casa. Que al terminar con Yawar Killa ya estaba, no mas animales en casa y mi peruanita termino a mis pies, como siempre.

No te quise nunca, y menos después de que tu “mama” te abandono. A ti, a tu “papa” y a nosotros, sin mirar atrás.

“…no la cojas con la perra, no te equivoques, ella no tiene nada que ver…” me insistían, pero tu seguiste allí, imponiéndote a nosotros, o al menos a mi. “…quien anda por ahí?…” te llamaba en la mañana y tus paticas sonaban y te llevaban corriendo a llenarlo de besos, hasta que yo entraba al cuarto y al verme salías disparada al jardín otra vez.

Lupita, Lope, Loops, Guadalupe y hasta María Guadalupe, la Perra Negra, que yo misma salve de llamarse de otro modo, con un nombre feo que no estaba a tu altura. Cucaracha, se pensó en un momento, y mira que tienes esos movimientos de arrastre furtivo cuando te conviene. Ni siquiera Chiripa, que suena menos malo. Caraota, también.

Por suerte tienes cara de Lupita y Lupita te quedaste.

Que vamos a hacer contigo, Lupita? Es la pregunta silente en la mente de todos.

Que vamos a hacer conmigo, me pregunto yo.

Tu defensor y protector se fue, definitivamente. Tercer abandono. Disfruto mucho de ti y tus travesuras de cachorro pendiente de un hilo al saberse no deseada. Cuando yo abria la puerta hacia el patio, parabas las orejas y venias arrastrándote a saludarme, hasta que oías el Quien esta por ahí? Llegabas antes que yo con su café.

Ya no quería ni verte mas.

Sentia y compartia tu abandono. Ya no entrabas por la mañana a mi cuarto.

Muy pronto nos mudamos de casa y junto a Dai la recorrian como locas, tratando de ubicarse. Donde esta mi comida ahora? El agua, la piscina para mojarme las patas, llenarme barro y entrar a la casa. Donde voy a dormir? Hasta cuando voy a estar aca?

Despues te acostumbraste, dormias en el sofá, aunque tenias una camita, porque no quise dejarte afuera por si ladrabas y molestabas a los vecinos. Llorabas, a la par que yo. Pero sobretodo cuando yo salía de la casa.

Tu “papa” te llamaba para que durmieras en su cuarto o al menos lo acompañaras y consolaras un rato. Te subias a su cama y si yo entraba te bajabas inmediatamente porque sabias que estaba mal. Igual lo hacias. Asi como igual te bajas del sofá disimuladamente cuando escuchas  mis pasos por la escalera.

Poquisimas semanas mas tarde, nos alcanzo de nuevo la desgracia.

Cuarto abandono.

Tu desesperación y pánico en tu soledad destrozaron los muebles. Hasta los forros comprados para disimular el desastre de huecos en el cuero, madera y en las telas.

Puedo entenderte, Lupita. Ojala yo hubiera podido hacer lo mismo.

Nunca has sabido controlarte muy bien, aunque eres inteligente y tienes la mirada reencarnada de Trufa. Aun ahora qye tienes tu propio plato de comida y de agua personal, nos gruñes en la mañana, a Dai y a mi, aunque estas moviendo la cola. No me has mostrado los dientes al menos. Gruñes y bufas como un toro. Pero tu mirada dice otra cosa.

Afortunadamente, aunque triplicas en peso y tamaño a la perra rubia, no lo sabes y te acostumbraste a ser la menor y no la alfa. Que suerte.

Que vamos a hacer contigo, Lupita?

Como va a seguir tu vida, perra negra?

Como va a seguir mi vida?

 

 

La maravilla de enamorarse desde niños

Es que empiezas jugando a saltar la cuerda, al escondite, hay un anhelo de no sabes que exactamente. Y un cariño dulce, un compañerismo y amistad, un deseo de pertenencia y de pertenecer. No se que.

Luego vas creciendo, aparecen bellos vellos en muchos sitios, crecen senos en terreno baldío, aparecen músculos y fortaleza que deseas apretar, la piel se endurece y desaparecen redondeces infantiles, y tu ahí, anhelando algo.

Descubriéndose ambos.

Hay algunos desvíos en el camino, pero pones primera, o “D”, enderezas el volante, de esos grandotes de antes, de cuando las palancas de cambio estaban detrás de el. Y aceleras!! Y encuentras el camino de regreso.

Y te encuentras con maravillas que aparecieron ayer, de la nada!

Y tanteas, poco a poco, sorprendida y suspirando.

Planeas, haces muchos planes y además planeas, como los aviones y descubres territorios extraños, pero verdes y fértiles.

Y sigues, creciendo juntos, almas que se reconocen desde siglos, desde los cantos rodados, y te entran ganas de gritar o de cantar o de llorar.

Entiendes ahora y aprovechas ese anhelo que te perseguía y lo disfrutas, arrebatadamente pero en calma, a su tiempo.

Tienes la fortuna de seguir y madurar. Crecer y multiplicarse. Como ensenan en la iglesia, como ensenan en la escuela, raíz, tallo, flor y fruto. Y mira que lo hicimos. Y con cuanta intensidad, amor

Ahora tu no vas a envejecer, como yo lo hago. Tu hermoso cabello, que tenia vida propia y se volvía mas canoso con tus preocupaciones y se oscurecía con tu tranquilidad, se quedara como al final, cuando sumergido en tus sueños, que espero serenos, se oscureció y se volvió aun mas brillante, como el de un ángel. Supongo que encontraste la paz finalmente. Tu perfecta piel no se marcara con mas arrugas, solo las que las alegrías mostraban en la comisura de tus ojos de esmeralda y en la frente tu cuidado y atención a todo y todos los que te rodeaba.

No mas, amor. Siempre joven, atractivo y hermoso. En el mejor momento de tu vida

Maravilloso todo esto, ciertamente

Desgarrante tambien

nada se pierde, solo se transforma

Recuerdas, claro, el sweater que me regalaste hace tantos anos? 40, puede ser?Tejido por una senora en el mercado de Chacao. Decido que lo voy a destejer y hacerme un rebozo, al mejor estilo antiguo, que me proteja de la brisa fria en los hombros, en esa lana cruda que tu escogiste y que yo tanto disfrute.

La usare para abrigarme en las noches o dias frios, cuando mas falta me hara tu calor, y tambien en algun momento arropare con el a algun nieto que la vida nos regale, y asi, aunque tu sabias que no conocerias a ninguno, lo estaras abrazando con tu amor de abuelo y bendiciendolo con tu amor.

Alguna foto pondre de ese momento si puedo y si no, tus hijos lo haran. Sera un legado de amor intemporal. No se perdera el amor con el que me  lo regalaste, se transformara en tu abrigo, en tu carino y orgullo, en tu proteccion inagotable como siempre hiciste y lograste. Te amo tanto, amor.

El amor no se termina con la vida.

En idiomas dormidos

Porque aprendí hace mucho tiempo a hablar con gente dormida que expresaba miedos y confusiones sin enterarse, ahora puedo dar respuesta, más o menos coherente, a ciertos comentarios que involucran tiempo, espacio y personajes y puedo responder, de manera muy segura, y sedante, con aseveraciones incompatibles, porque yo se cual es la verdad de la duda detrás de la incoherencia.

Nueva normalidad

En un arranque de desesperación, miedo intenso y soledad, Lupita casi destrozó la colcha de alpaca que pongo sobre el sofá para el frío, y digo casi porque le abrió unos agujeros muy extraños, circulares. La convirtió en un queso suizo.
Pensé en tirarla ciertamente, o dársela a ella misma para que recordara su pecado cada noche en que durmiera sobre ella.
Luego decidí cortar alrededor de los agujeros y hacerme de varias franjas que como rompecabezas fui armando y empatando en un quilt muy bizarro.
Uni las bandas con hilos de bordar en colores brillantes, para no disimular lo que sucedió sino para resaltar su sufrimiento al ser maltratada por dientes filosos, patas seguramente empantanadas y su posterior abandono.
Ahora es más pequeña, no es perfectamente rectangular y aún tiene pequeñitos agujeros que solo yo percibo y se dónde están.
‌Pero aún abriga y sigue siendo una colcha, solo que con una vida diferente a la que siempre conoció.
‌ Su nueva normalidad

Yuyos

Soy como una yerba no sembrada, como un yuyo.

Los perros me mordisquean para purgarse, me orinan, caminan pero también descansan sobre mi.

El Sol me quema a veces, casi hasta matarme, pero cualquier gota de agua hace que reviva.

Las lluvias me inundan y empantanan, me ahogan, pero yo sigo allí, a veces imperceptible.

Si me arrancas y pones en agua caliente quizás pueda ayudar a tu dolor de estómago. Eso soy, un yuyo.

A veces lanzo una flor tímida, silvestre, y algunas almas más simples las usan como parte de su corona y adorno. Así somos los yuyos.

aun bebe…

mi nina! el cumpleanos feliz  te debe encontrar asi, feliz, plena, majestuosa como eres, magnifica, esplendida, maxima, como un nombre de pila perfecto, por demas.

te sientes (ironicamente) vieja ante un espejo que solo te devuelve la imagen del cuerpo de una mujer  vibrante y preciosa,  con el cabello mas brillante y vivo que he admirado en mi vida, con unos ojos oscuros, cejas perfectas y el envidiado lunar que tienes, cielito lindo junto a tu boca!

quisiera consolarte, riendome, de tu “vejez” cuando no ves la maravilla que se presenta ante ti, la vida entera, tus manos sobre lo que desees, tienes la inteligencia, los medios y el carisma para lograr lo que se te antoje.  Aprovechalos, carajo! Deja la sensacion de vejez para dentro de 40 anos mas, y aun asi, nos reiremos de ti!!! Vive tu plenitud y el mejor momento de tu vida!!!

Deja de mirarte al espejo y mirate

Hijita mia, mi hermosa y fragante bebe, que nacio “ya criada” como decian las tias al verte tan perfecta y rosada, y grande,  tienes todo en ti!

Llora lo que quieras, lamentate y grita, si realmente lo necesitas. Ya sabes, carino, ya pasara, this too shall pass, incluso este magnifico dia en el que te haces una exitosa mujer de 26 anos.

Recuedo el arroz con bacalao, plato de cabala magnifico y amoroso que me preparaba tu papa como cena  previa a tu aparicion tan proxima ya!

Hija, todo esta bien, siempre lo estuvo, siempre lo estara, eres magnifica y siempre lo seras.  Eres la Reina, y no lo digo yo solamente. Te aclama como soberana un publico variopinto que no ha podido vivir sin ti y sin tu guia…

Tu vida, tus exitos y todos los aderezos que desees se expanden frente a ti, y te esperan como amigos, con los brazos abiertos y con una sonrisa amplia, con amor, con buena vibra.

Te adoro muneca, que chevere que hayas sido mi hija, mi amiga muchas veces, mi maestra, mi reganadora, mi companera fiel. Te quiero muchisimo, mas de lo que imaginas y me gustas mas que el brownie vegano de Camilla, que ya es una exageracion. Deseo tantas cosas y no-cosas para ti, que no puedo ponerlas…MI nina, mi artista, mi muneca, ojala algun dia comprendas cuanto te quiero.

feliz cumple

No dejes de oir la cancion de esta nueva (o vieja) etapa

te quiero, mi gorda, torta de pan

Para los dedos helados (y el clima gris…)

En cada temporada nos pasa lo mismo: “que frio que hace!, y con lluvia… Sabes cuando dan un dia lindo?, creo que este junio ha sido mas frio que el pasado, no crees?”

Al mismo ritmo en el que aparecen las bufandas y las camperas, los tes calientitos se multiplican, los chocolates calientes y los cafes gourmet abundan y se convierten en primera necesidad.

En otras latitudes, se acostumbra tambien a calentar el cuerpo con vino caliente y especiado, que invitan a una conversacion tan calida como la bebida, y en otras partes se disfruta muchisimo tambien la sidra caliente y es aqui, donde mi esposo me hizo un regalo fantastico. Una de estas tardes en las que no sabes si recostarte bien abrigada, darte una ducha caliente, ver la tele frente a la estufa, o alguna otra de estas soluciones, me llevo al salon donde estaba bordando, (mi hobbie mas reciente) una taza de humeante  y perfumada sidra. El otono se hizo mas agradable instantaneamente y los colores de los arboles que nos rodeaban se fundieron con el de la bebida. Tan ricos ambos, tan sonadores!

Esta sidra me rescato del frio y con  frecuencia caliento mis manos al sujetar la taza. Agua Salus Frutte de Manzana, a calentar suavemente en una olla, un trocito de canela en rama (no en polvo), un clavo de olor…Listo! podemos ir mas alla y agregar un trocito de gengibre, un poquito de miel o de jugo de limon, y hasta un chorrito de ron u otro licor, lo que nos llevara a descansar toda la noche.

desperdicio

Nadie podia percibir la igualdad de nuestra angustia, el frío que apretaba nuestro corazón sentadas las cuatro en aquellas sillas de clínica-hospital frente al consultorio donde minutos después nos llenarían el pecho de gel y nos conectarían para ver si nuestro corazón estaba mas sereno que nosotras y soportaría, sin mucho riesgo, el dulzor de la anestesia futura.

Yo, como fui la ultima en llegar, solamente di los buenos días, o las buenas tardes, que ya se sabe que el tiempo transcurrido en esos sitios se da vuelta de reves. Las otras tres mujeres me sonrieron y continuaron conversando.

“…pero es que Usted come suficiente, en cambio ella, no!” dijo con preocupación la mujer mas joven que sostenía y acariciaba el brazo de la  mayor sentada a su lado.

“…mire que yo le cocino todos los días lo que mas le gusta, que si un huevito hervido, una tarta de zapallitos, una maicena caliente dulcita, y nada, no come nada!” comento la chica volteando los ojos hacia arriba y mirando con afecto a la otra, como si regañara a una niña pequeña, por su falta de apetito.

Yo estaba esperando que dijera que también le hacia el avioncito para que abriera la boca y tomara las delicias ofrecidas, “un poquito mas, otra cucharadita” . La mujer objeto de todos estos comentarios, solo miraba con sus ojos increíblemente azules, y movía unas escasas hebras blancas de su cabello sonriendo tontamente.

La otra mujer, de una edad a medio camino de  las anteriores, dijo que si, que la falta de apetito era un problema y comenzó a enumerar con lujo de detalles la dieta que le habían mandado, “por un tema del colon, claro” y los litros de agua que debía tomar diariamente, “por un tema de sus riñones claro”.  Allí menciono también cuales frutas  tenia prohibidas, “por un tema de su diabetes, claro”, y el montón de pastillas que debía tomar, “por un tema del corazón, y de su derrame cerebral, claro” .

Yo estaba a punto de huir despavorida ante el cumulo de sus dolencias, cuando esta ultima le pregunto a la mas joven, “Y tu, eres su acompañante? a lo que la otra contesto, “Su hija, yo soy su hija. Disculpen un momento, que voy al baño, con permiso”  Y se alejo de nosotras tres moviendo las caderas, recordando seguramente los ritmos de Candombe recién escuchados en el carnaval mas largo del mundo, el de Uruguay, señores! en el que con toda seguridad bailo por las calles de Montevideo, luciendo su morenura de carnes apretadas y su corona de reina bien ajustada en los pequeñitos rizos color carbon.

Creo que la reina no habría llegado a los sanitarios cuando la viejita súbitamente adquirió vigor y declaro para que la oyéramos las dos, “Ella no es mi hija, sabés?  lo que pasa es que tiene tanto tiempo conmigo que ella dice así…” Su interlocutora, la de las múltiples enfermedades, le dijo que bueno, que ella tenia un hijo mas blanco que ella, y otro mas oscuro, como el padre.

Yo vi la cara de horror de la mayor, de que alguien pensara que había dado “un mal paso” o algo así y frunció sus delgados labios untados de carmín rosado, aplicados seguramente por la reina hija/no hija para que su madre/patrona se viera linda en su consulta medica.

Tanto amor desperdiciado. Yo lo que queria era llorar.

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