a mamá ntando…

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Siempre he sido una fanática de esas cosas hippies que tienen que ver con la familia. Además de vivir en una granja que produjera absolutamente todo y vivir rodeada de varios niñitos, mi hombre y mis animales varios, uno de mis mayores deseos era(hace 27 años!!!) dar a luz a los hijos que tuviera de manera natural, sin anestesia, y si hubiera sido posible, en mi casa con una comadrona y una doula. Que tiempos aquellos, tiempos de Lamaze, cursos prenatales, cuando se contaban las respiraciones, los tiempos entre contracciones, etc. Ahora todo es aún mas hippy, afortunadamente, mas contacto con tu cuerpo físico y con tu mente, ni hablar del contacto entre ambas auras, la posición que te está llamando para el nacimiento, el agua tibia, otros miembros de la familia como testigos del milagro, hasta algunas novedades que me asombran, como el parto Loto y otras hierbas que no recuerdo en este momento que beneficios trae pero creo que no superan el de recolectar las células madre. Claro que para ésto tendrías que estar en una clínica, con lo cual se pierde un poco lo floral del asunto.

Como en otras oportunidades me ha pasado, algo me llama, o hago algo de una manera determinada y resulta que así paso a formar parte de una especie de conciencia universal(del latín conscientia ‘conocimiento compartido’) y ya existente. Almas afines, pués.

Así que de repente, me encontré con grupos de mujeres (todo ésto en un ámbito virtual, con una sola excepción) que compartían mis intereses e ideas y amamantaban a sus hijos de manera exclusiva hasta pasados muchos meses, que preferían llevarlos cargados en sus brazos o sujetos de alguna manera a llevarlos en un cochecito (claro, hasta que las propias vértebras lo permitían), que respetaban su hambre y su sueño, que no los dejaban llorar innecesariamente aunque así se “malcriaran”, que llevaban a sus bebés a dormir en la cama y pasaban la noche entera alimentándolos sin siquiera perder un precioso minuto de sueño. Attached parenting, cosleeping, extended breast feeding, todo esto ya tenía nombre y yo no lo sabía. Tan solo actuaba por instinto y a la vez por lógica.

Nunca pude tener un parto en agua, y ni siquiera natural, pero si me dí mi gusto de dormir con ellos casi siempre y de tenerlos cargaditos, inventarles canciones para dormir, y alimentarlos con mi leche meses y meses y meses. Y recuerdo que en algunas oportunidades personas a mi alrededor, incluso del propio entorno familiar, se sentían un poco incómodos con este hecho. Equivocadamente, tendían a banalizar, ridiculizar y mal interpretar su propia incapacidad de comprensión. Por eso me autodeclaro defensora del amamantamiento, y aprovecho cualquier oportunidad que se me presente para felicitar a las sabias mamás que pasan por encima de varios obstáculos y mitos y alimentan a su retoño con el alimento perfecto.

Así que cuando entré en contacto con el Baby Bond, lamenté muchísimo haber pasado ya la etapa de disfrutarlo personalmente, pero me conseguí a una joven amiga que tenía un varoncito de 3 meses y se lo hice llegar, para su inmediato disfrute y élégance además. Tienen que ver el producto; la suavidad de la tela y excelente confección lo hace tan necesario para el ajuar del nuevo bebé como una mantita, o los pañales.

Finalmente, un producto sensato y una excelente manera de alimentar a tu bebé en público, cubriendo tu pecho y dejando a la criaturita libre y fresca para así poder disfrutar y crear el vinculo perfecto entre los dos.

3 modelos, 3 colores y 4 tallas, diseñado por una genial mamá que además lo modela y demuestra como utilizarlo.

Si quieres uno de obsequio, Baby Bond te lo regala si participas en este sorteo. Por favor visita la página de Baby Bond, me dejas un comentario en el blog SaborisCausa y una mano inocente elegirá entre todos. En un mes a partir de HOY, okey?
I received one or more of the products mentioned above for free using Tomoson.com. Regardless, I only recommend products or services I use personally and believe will be good for my readers.