papi…

Posted by Picasa

Mi papá se murió muy temprano, antes de lo que debía, mucho antes de que yo dejara de necesitarlo. Aunque fue mi papá, no fué el mismo papá de mis hermanos… no porque no compartieramos la misma sangre, sino por aquello de vidas pasadas.

Tuvo muchas vidas, su vida de hombre joven, moreno (negro para nosotros que aún nos maravillamos de que nuestra piel sea tan blanca a pesar de él), elegante y casi inmediatamente, su vida de hombre enfermo. Claro que esto no podía ser un calificativo, era muchísimo mas que eso.

Pero para mí, su “maraca”, “la menor”, “la pecosita”, mi papá no fué el mismo de los demás, a mí no me tocó el que estaba saludable.

Conmigo no pudo bailar, no los 15 años, que además casi no celebramos por un duelo que sobrellevábamos por la muerte de alguien que en este momento no recuerdo. No pudo enseñarme a bailar salsa ni merengue,afortunadamente no hizo falta, supongo que la sangre me lo transmitió, porque mira si lo bailo bien! Tampoco pudo compartir conmigo horas enteras envuelto su abdomen en plástico en maratones de ejercicios y bailes con mis hermanas, para adelgazar, para estar en forma. Un salsa-casino de ahora, pues.

Me tocaron cosas increibles con este papá, fuí muy especial para él, me regaló mi primer par de guantes de cuero para manejar, a juego con un paraguas con mango de madera pulida y un abrigo impermeable super chic para una criatura de 18 años. Viajé a Nueva York en primera clase, tomando champagne durante las cinco horas de vuelo, y ahí me decía salud! cada vez que el avión se movía y me asustaba.

Reímos mucho, lloramos mucho…

Cuando ya estaba de frente a la muerte, nos entusiasmó a Manuel y a mí a viajar todos a New Orleans, influyó definitivamente para que no tuviéramos nuestra luna de miel en Jamaica como teníamos planeado, sino a Aruba, adonde viajó con mi mamá, dos días después de nuestra boda y tuvimos una maravillosa luna de miel comunitaria!

Era difícil, muy difícil, pero en hoy no voy a hablar de eso. No hoy, probablemente nunca más. El beneficio de los que se han ido se lo brindo, y recordaré sólo lo bueno. Espero gozar de la misma cortesía cuando yo muera también, pues al fin y al cabo soy la hija de papá, y cargo con muchos de sus defectos. Recordaré su picardía cuando me iba a casar y cambió la hora en el reloj para quedarnos solos en la casa un rato, asustando a todos en la iglesia por nuestra tardanza,y su traje blanco como el mío y como el de Manuel…Recordaré sus empapadas en perfume, sus uñas pulidas, su inalterable elegancia, sus bastones, sus oscuras y suaves manos y sus abrazos, sus eternos domingos de celebración, cuando se podía, de champagne, langosta, caviar y paté y miles de cosas más que no recuerdo pero que siento al cerrar los ojos.

Lamento que se haya ido y que no nos hayamos podido disfrutar a nivel de adultos, me hubiera gustado que disfrutara con nosotros de este descubrimiento de vinos, hubiera querido destaparle, en silencio como me enseñó sin que explotara el corcho, heladas botellas de blanc de noire, mostrarle otros sitios, me hubiera gustado que cenara con nosotros en Cabaña Las Lilas, me hubiera gustado que conociera a mis hijos, quisiera haberle enseñado Caminito y que oyera y viera tango de verdad y en vivo, me hubiera gustado que leyera lo que escribo y lo que escribe Icho, los hermosos poemas que a veces me escriben mi esposo y mis hijos, que viera nuestros éxitos, nuestros esfuerzos, nuestra vida…

Pero en fin, los tiempos según dicen por ahí, siempre son perfectos, y nada podia suceder simplemente de otra forma. Así que nada te turbe, nada te espante, todo se pasa, Dios no se muda, la paciencia todo lo alcanza, quien a Dios tiene nada le falta. Sólo Dios basta.